“En muchas sociedades chamánicas, si acudías a un chamán o persona curandera aquejado de desaliento, desánimo o depresión, te hacía una de estas cuatro preguntas: ¿Cuándo dejaste de bailar? ¿Cuándo dejaste de cantar? ¿Cuándo dejaste de embelesarte por los cuentos? ¿Cuándo dejaste de encontrar consuelo en el dulce territorio del silencio? Cuando dejamos de bailar, […]